lunes, 3 de mayo de 2010

Cómo reparar pisos laminados

Los pisos laminados son probablemente los elementos más fáciles de usar en una instalación de pisos por su cuenta. Es muy fácil de llevar, se adhiere fácilmente al piso al que se aplica (dependiendo de la forma en que se aplica), y sobre todo, puede imitar la apariencia de cualquier tipo de acabado de pisos sin el mantenimiento que acompaña a los originales. Pero al igual que otros tipos de pisos, los pisos laminados se pueden romper y causar problemas. He aquí algunas maneras de reparar pisos laminados.


Los pisos laminados generalmente están disponibles en piezas en forma de baldosas. Se reconstruyen cuidadosamente en el suelo, para que se vea como un gran piso de cualquier diseño prescrito. Así que la manera más fácil de reparar pisos laminados consistiría en eliminar las partes dañadas, y ¡simplemente reemplazarlas con una nueva "baldosa"! ¿Suena muy fácil para ser un trabajo de reparación de pisos? Piense de nuevo, ¿que tan difícil sería tener que romper la simetría y tener que rearmarla utilizando nuevas piezas de suelo laminado?

Bueno, es probable que el suelo laminado este muy pegado al piso. Después de todo, usted lo colocó para que se viera y se sienta como un piso real sin tener que mantenerlo. Sacarlo de a pedacitos es arriesgado, ya podemos sin querer sacar alguna parte de las "baldosas sanas". Pero si usted no tiene otra opción, siga estos pasos tácticos:

La parte dañada ya está dañada, por lo que será reemplazada si o si y se considera sin valor. Por lo tanto, para eliminar la parte dañada, comienza sacando las partes del centro. Vaya rompiéndola usando un cincel y trabaje con cuidado hacia el final de la baldosa. Es posible que desee dividirlo en dos piezas, para así no tener que limpiar todas las pequeñas partecitas.

Después de romper la baldosa, tire con cuidado sin dañar las baldosas adyacentes. Recuerde, si usted accidentalmente despega la baldosa de al lado, significa que usted tendrá que reemplazar esa baldosa también. Evite el terrible efecto dominó lo más posible. Elimine los últimos restos del material que ha utilizado para pegar el piso laminado. Tenga cuidado ya que el material se puede pegar a otra baldosa, por lo que tendrá que sacar el área defectuosa de las áreas normales antes de tratar de separarlas. ¿Y mencioné evitar el efecto dominó a toda costa antes?

Por último, aplique el piso laminado nuevo, como si lo estuviese aplicando por primera vez. Use una capa muy delgada del material adhesivo alrededor de las otras baldosas. Usted realmente no quiere que el material se pegue a un azulejo nuevo y que el piso se ensucie después.


Fuente: http://www.visitacasas.com/

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