En una época en el que las líneas rectas se imponen en la decoración, no está de más marcar una diferencia con algún mueble de líneas clásicas, que destacará especialmente en el salón o en el recibidor. Sin embargo, no queremos que nuestra casa se parezca a la de nuestros padres o nuestros abuelos, y sin duda preferimos que nuestros muebles no sean demasiado clásicos sino que, a pesar de sus formas, parezcan modernos.
Os proponemos una decoración de estilo isabelino renovado, conservando la esencia de los muebles del sigo XIX, pero teniendo en cuenta los gustos y las necesidades del siglo XXI.
La clave sigue estando en la solidez de los muebles y en los elementos básicos de su decoración. Sin embargo, ya no se hace ostentación de la calidad de la madera, sino que muy a menudo ésta se pinta de colores o se le da un aspecto metalizado.
Las patas cabriolé se adaptan y ya no son tan recargadas ni se adornan tanto. Nada de patas con forma de garra de animal ni esfinges talladas, pero sí a la elegancia de una suave línea curva.
Cómodas, consolas y mesas de centro son los muebles más fácilmente adaptables, además de las sillas, con ligeras variaciones pero respetando siempre el mismo espíritu.
Se mantiene la elegancia, pero los muebles isabelinos renovados pierden la fastuosidad de antaño y resultan más adecuados para las viviendas contemporáneas.
Visto en: DecoraliaMuebles, MaisonsduMonde, PortobelloStreet y MueblesRey.
Via : http://www.estiloydeco.com/
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