El fenómeno de la vida media conocido como la menopausia y las tensiones nerviosas de ansiedad van de la mano. Ataques de pánico, golpes de energía, sensación de quemazón en el busto, vibraciones inusuales a lo largo del cuerpo y sensaciones de calor son algunos de los efectos físicos que usted puede sentir bajo esta condición.
Cuando la menopausia llega, hay una mayor probabilidad de que las mujeres pasen a través de la ansiedad y la depresión. Christian Northrop habla sobre este fenómeno en su libro, "Sabiduría de la Menopausia", donde dice que si una mujer tiene reprimido algo en su vida, no podrá atravesar la menopausia utilizando los mismos métodos. Por ejemplo, la cólera no expresada encontrará su salida y algunas veces en las formas más inusuales o incómodas.
En lo que a menudo se considera una "crisis de vida media", se llega a un momento en que las mujeres se reevalúan a sí mismas y al papel que juegan a medida que envejecen. Y, a menudo no es muy cómodo lo que encuentran. Una pequeña de voz en la parte de atrás de sus cabezas dice, "¡si usted no realiza cambios ahora… nunca los hará!". Nuestros desequilibrios hormonales (debido a los niveles disminuidos de estrógeno) pueden contribuir a sentimientos de depresión o nos pueden hacer sentir simplemente indiferentes. Aun si la menopausia realmente no causa estas condiciones, puede aumentar la ansiedad latente y la puede traer a la superficie.
La ansiedad es un sentimiento prolongado de temor y preocupación sin razón particular detrás. Es incómoda y causan estrés, en particular en el cuerpo. Puede desencadenarse por los problemas en la vida de todos los días, como pagar las cuentas e ir a trabajar. Aunque preocuparse por estas cosas para una persona normal tiene su límite de severidad, las mujeres menopáusicas que sufren de ansiedad se inclinan a pensar acerca de sus problemas excesivamente.
Cuando la ansiedad finalmente golpea su pico más alto, a menudo se conoce como ataque de pánico. Los ataques de pánico son episodios debilitantes de miedo y temor que incluyen dolores de busto, miedo a la muerte y sacudidas. En lo que se llama depresión "psicosocial", las mujeres crean actitudes y creencias negativas en cuanto a envejecer, asumiendo papeles no deseados como el de niñera y respondiendo negativamente a los maridos impacientes que podrían exigir tener relaciones.
Fuente: http://www.visitacasas.com/
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